El gobierno japonés está considerando permitir la entrada de más extranjeros para estadías de tres meses o más a partir de octubre, informaron el miércoles fuentes con conocimiento de los planes, lo que alivia significativamente las restricciones de viaje destinadas a frenar la propagación del nuevo coronavirus.
Alrededor de 1.000 extranjeros recibirán entrada diaria bajo las restricciones flexibilizadas, con una mayor capacidad de prueba de virus en los aeropuertos, dijeron las fuentes.
Los turistas aún tendrán prohibido ingresar a Japón, que ha impuesto una prohibición de entrada para 159 países y regiones.
Japón recibió un estimado de 8.700 viajeros extranjeros en agosto, un 99,7 por ciento menos que el año anterior.
Publicado por Japón And More en Sábado, 19 de septiembre de 2020
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El gobierno ha comenzado a reducir gradualmente las restricciones de viaje, y a los extranjeros con estatus de residencia en Japón que habían viajado fuera del país se les permitió regresar a partir de septiembre.
A los empresarios ya se les ha permitido venir de algunos países asiáticos, incluidos Vietnam y Tailandia, bajo ciertas condiciones, que incluyen proporcionar resultados negativos de la prueba COVID-19, y los estudiantes extranjeros con becas gubernamentales también pueden ingresar al país.
Según las fuentes, el gobierno planea expandir en gran medida el alcance de las personas que están exentas de la prohibición de entrada a partir de octubre, con estudiantes extranjeros que no reciben subvenciones del gobierno, personal médico, atletas y quienes participan en actividades culturales entre los que se les permitirá entrar.
El secretario jefe del gabinete, Katsunobu Kato, el portavoz principal del gobierno, dijo el miércoles que Japón hasta ahora ha logrado reanudar parcialmente los viajes sin desencadenar un resurgimiento de las infecciones por coronavirus, y que se pondrá una «seria consideración» en aliviar aún más las restricciones.
Japón ha visto más de 80.000 infecciones con un número de muertos de más de 1.500, significativamente menos que los países más afectados como Estados Unidos, que se acerca a los 7 millones de infecciones.