Las autoridades de Japón han detenido este miércoles a un hombre por hacer uso de un collar eléctrico para perros para «educar a sus tres hijos», según ha informado la Policía nipona.
El hombre, de 45 años y residente de la localidad de Kitakyushu, en el sur del país, ha indicado a los agentes que castigaba a sus dos hijas, de 17 y 13 años, y su hijo, de 11, con una collar eléctrico «cuando no hacían caso».
Las fuerzas de seguridad han explicado que el menor había sufrido una quemadura leve en uno de sus brazos mientras que las niñas no tenían marcas visibles.
Japón ha sufrido una ola de abusos infantiles durante los últimos años, incluido el caso de una niña de 5 años cuyo padre la apuñaló y golpeó en nombre de la «disciplina».
El primer ministro japonés, Abe Shinzo, prometió entonces tomar medidas para acabar con este tipo de casos.
Los legisladores en la cámara Baja del Parlamento aprobaron el martes por unanimidad un plan para prohibir el castigo corporal hacia los niños por parte de sus padres.
Más de 50 países, la mayoría en Europa, tienen leyes que prohíben el castigo corporal de los niños en el hogar, lo que, según algunos investigadores, es una forma ineficaz de disciplina.
Japón sería el tercer país de Asia en instituir una prohibición de este tipo después de Mongolia en 2016 y Nepal dos años después.