Visitar Japón seguro es muy divertido, a no ser que tengas alergia a ciertos alimentos, especialmente si entre ellos se encuentra el trigo sarraceno.
En Japón, “soba” (fideos de este cereal) tienen un papel más que prominente en la cocina nacional. Han sido aplaudidos por su sabor ligero y dulce, y sus propiedades nutritivas durante más de 400 años. Sin embargo, incluso los nipones que más lo aman no están libres de las reacciones alérgicas que se pueden manifestar debido a su ingesta.
Cerca del 0.03% de la población del país lo que se traduce en casi 4 millones de personas son alérgicos a este platillo, y es una de las alergias más comunes entre los estudiantes japoneses. Soba se conoce de forma coloquial como el “cacahuete de Japón” -porque equivale al gran causante de alergias en Occidente.
Pero a medida que crece el número de turistas que quieren experimentar la cultura gastronómica de la isla, Japón se enfrenta a un nuevo problema: los extranjeros que desconocen el rechazo de su cuerpo hacia este platillo. Para abordar la cuestión, la agencia J. Walter Thompson Japan ha desarrollado un invento muy ingenioso: tatuajes temporales que muestran si eres alérgico al soba.
Contratados por 230 Soba Street Promotion Committee, una alianza de restaurantes de soba en Hokkaido, la agencia y el dermatólogo Mami Nomura han creado el comprobante de alergias inspirado en tattoos japoneses de estilo ukiyoe.
Las estampas temporales tienen que aplicarse usando soba-yu, el caldo con el que se cuece soba, en lugar de agua. Si la persona es alérgica, la piel se le enrojecerá y el tono se podrá apreciar a través de ciertas zonas del dibujo que aparece en el plástico.
Los diseños son tan geniales que te los pondrías aunque no tuvieras alergias, pero por desgracias, no están disponibles a la venta y solo se usarán para eventos especiales en Hokkaido.
Dicho esto, el comité de Soba quiere poder empezar a distribuir las pegatinas por Japón lo antes posible.